El mundo actual se sumerge cada día en decadencia, sea moral, espiritual o física, en todos los sentidos este mundo se degenera, y cada nueva generación nace con mayores problemas y complicaciones ¿qué haremos nosotros, en medio de una sociedad decadente, para marcar la diferencia?
Aún existe esperanza, de hecho siempre la ha habido y está a nuestro alcance, claro que no arreglaremos el mundo entero, pero impactaremos nuestro entorno, nuestra familia, nuestras generaciones; nuestros hijos podrán ser personas prósperas y de bien y ellos a su vez producirán nuevas generaciones igual o aún más bendecidas, pero, para lograr esto, debemos guiar a cuantos podamos a los pies de Cristo, enseñando del arrepentimiento de sus pecados, para que experimenten el regalo de la salvación, eso es lo que el mundo realmente necesita, solamente debemos acercarnos a la fuente del conocimiento, al manantial de sabiduría, la palabra de Dios.
Oseas 4:6, nos recuerda que el pueblo de Dios fue destruido porque le faltó conocimiento, y que Dios se olvidó de sus descendientes, porque ellos se olvidaron de la instrucción de Dios.
Entendemos entonces la importancia del conocimiento de Dios, de seguir sus mandamientos para vivir, de transmitir esas verdades a nuestros hijos para criar generaciones de personas integras, de lo contrario, nos espera un triste futuro, destrucción según lo que vemos en Oseas, destrucción física, moral y espiritual, ¿Qué tan importante es en tu vida la palabra de Dios? ¿Cuánto conoces de Dios? ¿Estás listo para conocerle de una manera en la que no lo has hecho antes? Ánimo amigo, ánimo hermano, este espacio que abro hoy, es especialmente para ti que buscas respuestas, que buscas ayuda, espero encuentres acá el apoyo que necesitas y fortalezcas tu fe en Dios.
Gracias por tu tiempo, recibe un fuerte abrazo y que Dios te bendiga.
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