Así que podríamos hacer un resumen en este punto, los géneros de lenguas se dividen en humanas y angélicas, las humanas han servido para la propagación del evangelio y las espirituales pueden usarse para edificación de la iglesia y de nosotros mismos (pues también somos iglesia) siempre que esto se haga en orden.
Hay diversidad de dones, pero todos son dados por medio del Espíritu Santo, no por merecerlos, sino solamente por gracia para que podamos servir de diversas formas a nuestro Señor Jesús, quien es administrador de estos dones; y de esta manera veamos el poder de Dios, obrando por medio de diferentes operaciones en la vida del creyente